Seguimos navegando hacia el sur. A estribor divisamos Banyuls-sur-Mer. Olivier señala dos boyas amarillas que flotan en el agua. Desacelera a 8 nudos. Por fin entramos en la Reserva Natural Marina de Cerbère-Banyuls.
Joya de la Côte Vermeille, la Réserve Naturelle Marine se extiende entre Banyuls y Cerbère. Paraíso de bañistas y submarinistas, este espacio natural protegido es la primera Reserva Natural Marina de Francia.
Bordeando el litoral rocoso de los Pirineos Orientales, la Reserva abarca 650 hectáreas de mar y se extiende a lo largo de 7 kilómetros de costa hasta 1,5 millas mar adentro.
Se creó en 1974 para frenar la destrucción del litoral por la pesca y la contaminación. En la actualidad, en la Reserva se organizan periódicamente actividades de vigilancia de las praderas de posidonia, el coralígeno, los medios rocosos, las poblaciones de peces y la vigilancia ecológica.
Está permitido bucear y nadar, siempre que se amarre a las boyas previstas para evitar el fondeo, que está prohibido. Elegimos Cap de l’Abeille como punto de parada: nos proporcionaron gratuitamente máscaras y tubos, y exploramos el increíble mundo de la Reserva. Pudimos ver algunos peces, como girelles y saupes. Incluso vimos un gran mero.
Hay muchas normas que cumplir. Puede obtener más información en el sitio web de la reserva.